viernes. 19.04.2024

La Xunta de Galicia, a través de Sogama, acaba de adjudicar el contrato para la construcción de la nueva planta de transferencia en Curtis a la UTE ATE Cartago, por un importe de 1.195.361,45 euros (IVA incluido).

La futura instalación, que sustituirá a la microplanta que actualmente está en funcionamiento en este ayuntamiento coruñés, ganará en capacidad —llegando hasta las 17.000 toneladas anuales—, eficiencia y funcionalidad, ya que, además de trasvasar en la misma las fracciones de residuos correspondientes al contenedor amarillo (envases de plástico, latas y briks) y contenedor genérico (fracción resto), podrá acoger la materia orgánica recogida en su momento a través del contenedor marrón.

Si bien dará servicio inicialmente a los ayuntamientos de Sobrado dos Monxes y Vilasantar, además del de Curtis, estará a disposición de otros 15 municipios. Además, la planta se incorporará a la red de infraestructuras diseñada por la Xunta para que la mayor parte de los ayuntamientos adscritos a Sogama puedan acceder a la valorización de los residuos orgánicos y cuenten con una instalación de biorresiduos o de transferencia a menos de 50 km.

En este sentido, hay que recordar que los entes locales disponen de plazo hasta el 31 de diciembre de 2023 para implantar la recogida diferenciada de la materia orgánica a través del contenedor marrón y, aunque se trata de una competencia municipal, la Xunta les ayudará a cumplir con sus deberes legales.

Para esto, habilitará una red conformada por cuatro plantas de biorresiduos —Cerceda, ya en funcionamiento; Cervo (Lugo); Vilanova de Arousa (Pontevedra); y Verín (Ourense)— a las que destinará una inversión de aproximadamente 38 millones de euros, contando con una cofinanciación de los Fondos FEDER de 30 millones.

Estas instalaciones estarán apoyadas por 13 plantas de transferencia, entre ellas la de Curtis, que contará con una tolva específica para el trasvase de la basura orgánica, que se transportará a la planta de compostaje más próxima.

Por lo tanto, serán 17 las instalaciones que conformarán esta ambiciosa infraestructura, previendo que entren en funcionamiento a finales del año 2022. En el caso de la planta de Curtis, se estima que estará operativa con anterioridad, probablemente el próximo verano.

NUEVO COMPLEJO

La futura planta se localizará en el polígono industrial de Teixeiro, en una parcela de casi 8.000 m2. Contará con una nave de 600 m2, una zona verde de aproximadamente 1.300 m2 y estará equipada con un compactador fijo, una báscula, un sistema de traslación con capacidad para tres contenedores, un aparcamiento para los propios contenedores, un edificio destinado la oficina, vestuario y almacén.

Asimismo, se alimentará con energía solar, a través de paneles fotovoltaicos, fomentando de este modo el autoconsumo de las instalaciones a través del aprovechamiento de energías renovables.

Nueva planta de transferencia de residuos de Curtis