28/3/23
IN MEMORIAM: Loliña, una estrella en un diván

"(...)Carril adquiriría una dimensión con especial sabor y fulgor explosivo desde que en 1939 se abriera allí un café bar con billar, que recibió el nombre de Loliña. Era un local esquinado que había albergado la aduana y el casino. Se alquilaba por 15 pesetas mensuales y eso animó a sus promotores, un carpintero de ideas republicanas, Manuel Bóveda, y a su esposa, María Ríos, a demostrar su audacia y poder homenajear su paternidad otorgándole a su todavía humilde establecimiento un apelativo familiar, el de su hija, bautizada oficialmente como Dolores Bóveda Ríos.(...)"