jueves. 18.04.2024

Biopolímeros, reductores del efecto invernadero

AIMEN Centro Tecnológico participa en el proyecto europeo PROMICON que tiene como objetivo principal analizar el comportamiento de comunidades de microorganismos naturales, conocidas como microbiomas, a través de métodos innovadores para la producción de biopolímeros, vectores energéticos y materias primas.
El trabajo de AIMEN consiste en el desarrollo de un sensor de bajo coste, basado en análisis de imágenes multiespectrales, que permita monitorizar de forma online cultivos de microbiomas.

 AIMEN Centro Tecnológico participa en el proyecto europeo PROMICON que tiene como objetivo principal analizar el comportamiento de comunidades de microorganismos naturales, conocidas como microbiomas, a través de métodos innovadores para la producción de biopolímeros, vectores energéticos y materias primas.

El consorcio del proyecto PROMICON pretende comprender así el funcionamiento de los microbiomas existentes en la naturaleza a través del desarrollo y la aplicación de técnicas de fisiología cuantitativa, de análisis de imagen, inteligencia artificial y biología de sistemas. Esta información se utilizará para hacer viable la explotación de los microbiomas naturales en un futuro cercano, dando pasos hacia la producción de moléculas de interés para la industria.

Los resultados de este proyecto permitirán la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, del consumo de energía y de los costes de producción en industrias relacionadas con la fabricación de plásticos, productos químicos y combustibles.

Además, se generarán nuevos cultivos microbianos sintéticos que incluirán cepas modificadas y mejoradas a través de ingeniería metabólica de sistemas que se utilizarán para la producción de combustibles, compuestos químicos y materiales de origen biológico: bioplásticos o pigmentos naturales empleados en industrias como la alimentaria o la farmacéutica.

Para ello, PROMICON desarrollará herramientas que permitan identificar y caracterizar las cepas bacterianas necesarias para que un microbioma sea exitoso en biotecnología. Este conocimiento permitirá reducir la complejidad de los microbiomas naturales y modelar microbiomas sintéticos de complejidad creciente para la producción de butanol e hidrógeno (H2), así como para la producción de un novedoso poliéster antimicrobiano funcionalizado (PHACOS).

Este proyecto pionero no solo inspirará nuevas vías de producción y un cambio de paradigma de los monocultivos a los cultivos mixtos en biotecnología, sino que también tiene potencial para proponer nuevos desarrollos en biomedicina.

Los principales resultados esperados de PROMICON son la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (como el CO2), del consumo de energía y de los costes de producción en industrias relacionadas con la fabricación de plásticos, productos químicos y combustibles.

El proyecto, en el que participan 10 socios de 7 países europeos, está financiado por la Comisión Europea en el marco del programa H2020 y cuenta con un presupuesto total de 3,5 millones de euros.

CONSORCIO INTERNACIONAL

El proyecto PROMICON es una colaboración de 2 universidades, 3 centros de investigación, 4 socios industriales y 1 asociación de 7 países: Helmholtz Centre for Environmental Research (Alemania); Uppsala University (Suecia); NOVA ID FCT - Associação para a Inovação e Desenvolvimento da FCT (Portugal); Universidad Politécnica de Cataluña - UPC (España); AIMEN (España);  CSIC (España); Pensoft Publishers (Bulgaria); onCyt Microbiology (Suiza);  Isle utilities BV (Holanda); y  BIOPOLIS SL (España).

El trabajo de AIMEN consiste en el desarrollo de un sensor de bajo coste, basado en análisis de imágenes multiespectrales, que permita monitorizar de forma online cultivos de microbiomas. Estas tecnologías de monitorización serán combinadas con técnicas de aprendizaje automático que permitirán extraer información de las características del cultivo, ayudar al desarrollo de los propios sensores y ampliar los conocimientos de estos bioprocesos. Toda esta información continua permitirá establecer una estimación en tiempo real del estado del microbioma y su óptimo nivel de crecimiento para maximizar la producción de bioplásticos, pigmentos y otras substancias aprovechables comercialmente.

Biopolímeros, reductores del efecto invernadero
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