Lisboa, jóvenes de distintas nacionalidades interiorizaron el mensaje de Francisco

El grupo de Vigo tras llegar a Lisboa.
Santuario de Nuestra Señora de Fátima desde la explanada.
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La iglesia donde están enterrados Jacinta y Francisco.
Camino para penitentes que llega hasta la Capelinha, lugar donde se apareción la Virgen.
El joven penitente es ayudado por familiares.
Otro joven que lentamente recorre el camino...
Los españoles siempre se hacen ver en el Santuario.
Los peregrinos vigueses asistieron a la santa Misa en la Capelinha de la Virgen.
Tras bajar del autobús...
Todos los peregrinos, antes de disponerse a caminar a la zona de la JMJ.
Los voluntarios en el punto de avituallamiento.
Así se dirigían a su sector para de la JMJ por las calles de Lisboa.
El grupo de italianos que eran 150 jóvenes.
Aurora consiguió cambiar su sombrero por el de una colega mexicana.
El ingeniero civil y escritor, Gabriel Romero.
Grupo de Ecuador.
Al terminar pudimos ver una bandera gallega.
Yaser vino de Nicaragua y es del camino Neocatecumenal.
Familias tan prolífícas como esta no era raro verlas.
Ante de que pasase el coche papal, una madre pide así la bendición de su hija.
Hasta las rotondas era un buen sitio para pernoctar.
El grupo de Vigo camino del sector correspodiente.
Así estaba la mañana del domingo.
I
Bea y Fran, de Vigo.

Diario Luso-Galaico viajó en un autobús, lleno de peregrinos de distintas edades, desde Vigo para vivir de cerca la peregrinación. Se constató, cómo esta fiesta de la fe, por el testimonio de aquellos que quisieron compartir la repercusión en su interioridad al término de la misma, lo que inspiró y movió a cambiar a estos peregrinos.