sábado. 14.12.2024

La conselleira de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda, Ángeles Vázquez, defendió esta mañana que la futura Ley de Ordenación del Territorio (LOT) está llamada a garantizar la cohesión social y mejorar la calidad de vida de los gallegos, completando así el camino que inició en 2016 la Ley del Suelo y después su reglamento para dotar a Galicia de una normativa urbanística más simple, ágil y eficaz.

Así lo subrayó la conselleira durante el debate de totalidad de la ley, que retomó hoy su tramitación parlamentaria después de que el pasado mes de enero la convocatoria de elecciones en la Comunidad gallega la dejase en suspenso.

Con el fin de completar el actual marco normativo en materia de urbanismo y actualizar una norma con 25 años de vigencia, Vázquez Mejuto subrayó que los tres grandes objetivos a los que la Xunta quiere responder con la nueva LOT son lograr que ningún ayuntamiento gallego esté sin plan general, facilitar el desarrollo ordenado del medio natural y garantizar la protección del paisaje.

La consideración del paisaje como pieza fundamental de la ordenación del territorio, explicó la conselleira, es una de las mejoras que se quiere introducir a través de esta ley, con el fin de adecuar la normativa a las nuevas exigencias y criterios de aplicación en este ámbito, principalmente aquellos de índole ambiental. “El territorio es nuestro bien más preciado, el soporte en el que desarrollamos todas nuestras actividades”, argumentó la conselleira, para defender que Galicia necesita un texto que lo defienda, proteja y ponga en valor “con las máximas garantías”.

Tal y como explicó Vázquez Mejuto, el objetivo básico es actualizar y hacer más eficaz el marco normativo urbanístico de Galicia, al tiempo que se simplifica administrativamente su aplicación. En ese sentido, recordó que el texto elaborado por el Gobierno gallego reduce a cuatro el número de instrumentos de ordenación del territorio: Directrices de Ordenación del Territorio; Planes territoriales (diferenciando entre integrados y especiales, en función de su mayor o menor escala y ámbito de afección ambiental); Planes Sectoriales; y Proyectos de Interés Autonómico.

La principal novedad a este respecto es la creación de los Proyectos de Interés Autonómico como único instrumento de intervención directa en el territorio, y que sustituye a los actuales Proyectos Sectoriales de Incidencia Supramunicipal. Su función será la de planificar y ejecutar actuaciones concretas en el territorio que trasciendan el ámbito del municipio por su impacto territorial, económico y sociocultural, como puede ser la implantación de dotaciones urbanísticas, la creación de suelo destinado a vivienda protegida o a actividades económicas.

Además, podrán ser de iniciativa pública o privada y desarrollarán planes sectoriales ya vigentes o, por el contrario, ser autónomos. Como novedad, su declaración de impacto ambiental caducará a los tres años.

Vázquez Mejuto explicó que también se introducen novedades en la figura de ordenación de los Planes Sectoriales, cuyo ámbito de aplicación se amplía para que sea, como norma, toda la comunidad autónoma.

El principal objetivo de los cambios introducidos es conseguir una mejor ordenación de las actividades sectoriales que se pueden implantar en el territorio a través de esta figura, como pueden ser la gestión de residuos, las viviendas protegidas o las equipaciones supramunicipales. Además, los Planes Sectoriales solo podrán ser promovidos por iniciativa pública, a diferencia de lo que dice la actual ley, ya que, como defendió la conselleira, la planificación a nivel Galicia de este tipo de actividades solo tiene sentido desde la perspectiva de la Administración.

AGILIDAD

Otra de las novedades es que se fija un único procedimiento de tramitación para todos los instrumentos de ordenación con el fin de agilizar la tramitación administrativa y evitar duplicidades. De este modo, se someterán a evaluación ambiental estratégica, común o simplificada, integrando el procedimiento ambiental en el de tramitación del propio instrumento.

Asimismo, también crea el Registro de Ordenación del Territorio y Planeamiento Urbanístico de Galicia, con el que se garantiza una mayor seguridad jurídica, transparencia y accesibilidad. Así, en este registro deberán inscribirse todos los instrumentos de ordenación del territorio antes de su entrada en vigor, una garantía de que se trata de su versión definitiva y de que, tanto administraciones como ciudadanía, podrán acceder a su contenido.

Por último, la conselleira recordó que la futura Ley de Ordenación del Territorio se enmarca dentro de la apuesta realizada por el Gobierno desde hace más de una década para poner a disposición de todos los gallegos más de una decena de leyes, instrumentos y herramientas para alcanzar el equilibrio entre el crecimiento urbanístico y el económico; entre el desarrollo territorial y la puesta en valor de la Galicia verde y azul.

Ningún ayuntamiento gallego sin plan general