viernes. 26.04.2024

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, destacó hoy que la nueva Ley de Pesca Continental apostará por un modelo de pesca sostenible capaz de generar empleo y riqueza y por el relevo generacional. “La norma tiene también el objetivo de dotarnos de una buena planificación estratégica de gestión, así como emplear la pesca como herramienta de desarrollo turístico, económico y social en medio rural”, explicó sobre esta ley, que sustituye a la de 1992.

Durante la rueda de prensa del Consejo, y en relación a “atraer gente joven a los ríos”, Feijóo avanzó la puesta en marcha de las Escuelas de río, con el fin de implicar y educar a los más pequeños en la conservación de los ecosistemas acuáticos continentales. “Y los jóvenes de edad igual o inferior a 14 años podrán practicar pesca sin necesidad de licencia –siempre que estén acompañados por un adulto con licencia-”, añadió, precisando además que, tanto los menores de edad que quieran solicitar licencia como los mayores de 65 quedarán exentos del pago de tasas.

Asimismo, anunció que a comienzos de 2020 se convocará una orden de ayudas dirigida a las entidades colaboradoras de pesca fluvial para fomentar la riqueza piscícola, con una aportación para acciones de vigilancia y actividades formativas y divulgativas. “Los pescadores están enamorados de su deporte y creemos que ellos son los que mejor pueden transmitir las ventajas de la pesca continental en Galicia”, valoró.

En relación al fomento de la pesca sostenible, el titular del Gobierno gallego aseveró que el objetivo será aumentar su implantación. Para eso, se pondrán en marcha medidas como: actividades de promoción y divulgación de manera preferente por parte de entidades colaboradoras de pesca; programas de formación específica dentro de la Estrategia gallega de educación ambiental; o la limitación de esta modalidad como la única permitida en el caso de los escenarios deportivos, sociales y de formación creados por la ley.

Con respecto al fomento de la riqueza en el rural, el texto incluirá una nueva clasificación para los más de 14.000 kilómetros de ríos de cierta entidad que permite establecer dos nuevas categorías. Así, las aguas pescables podrán ser libres o de régimen especial; y, dentro de las de régimen especial se mantendrá la categoría de masas de agua de especial interese para la riqueza piscícola y los cotos de pesca.

“Y se añaden además las categorías de escenarios deportivos, sociales y de formación; y de aguas de pesca privada”, dijo, subrayando que, con esta última modalidad se permite el entrenamiento a los competidores, activando la economía de la pesca en los períodos de veda y obteniendo beneficio directo sobre las zonas rurales, unos permisos a los que pueden optar las empresas turísticas.

En esta línea, se refirió también la previsión de la concesión de aprovechamientos piscícolas en tramos de ríos, embalses y lagunas, la empresas turísticas; a la posibilidad de regular la reserva de permisos para fomentar esta actividad en aguas pescables que se determinen; y la inclusión de la especial protección y regulación para determinadas actividades tradicionales de pesca continental de carácter etnográfico, como las pesquerías del río Ulla y las estacadas del Tea para la pesca de la lamprea.

Por otra parte, hace falta destacar que al amparo de la nueva ley se redactará un Plan de ordenación de la pesca continental, complementario con los actuales instrumentos de planificación de esta actividad y que tendrá en cuenta muchos aspectos que ya recoge la propia norma: por ejemplo, las repoblaciones y sueltas serán realizadas únicamente con especies autóctonas y contarán con una planificación previa de la Consellería de Medio Ambiente.

Sobre las especies exóticas invasoras, Feijóo resaltó que, por primera vez, una norma con rango de ley recogerá el sentido del marco normativo básico –estatal y comunitario- sobre la gestión de estas especies, con la la posibilidad de adoptar medidas específicas de control y captura. Y, en lo relativo a las artes y medios de pesca, se añade la prohibición del empleo de sustancias o aparatos paralizantes, tranquilizantes, atrayentes o repelentes de pescados.

Como novedad, se introducirá también un sistema de autoguiado para el caso de los reos, en el que el propio pescador será el que comunique a la administración los datos de los reos capturados. Un sistema novedoso a nivel nacional, pero que ya se está utilizando en otros países de la Unión Europea.

Por último, y en el ámbito de las sanciones, el nuevo texto propone una reestructuración y simplificación de las infracciones al eliminar la categoría de menos grave, reubicando estas conductas entre las infracciones leves y las graves.

La nueva Ley de Pesca Continental apostará por un modelo de pesca sostenible