La exposición "La memoria colonial en las colecciones Thyssen-Bornemisza" llega a su recta final con una programación especial diseñada para profundizar en los temas abordados y ofrecer una experiencia más completa al público. Durante el último mes, el museo madrileño ha preparado una serie de actividades que van desde conferencias y proyecciones hasta performances y presentaciones de cómics, todas ellas con el objetivo de descolonizar la mirada y repensar las obras de arte desde una perspectiva más diversa e inclusiva.
Entre las propuestas más destacadas se encuentra el Salsódromo: Imaginarios polirrítmicos, una actividad que invita a explorar la relación entre la música y la identidad a través del baile. Además, la presentación del cómic El cóndor y la caníbal de Víctor Coyote promete ofrecer una mirada crítica y humorística sobre la historia colonial.
La historiadora del arte Suset Sánchez ofrecerá una conferencia titulada Negras, cholas, chinas, rubias… Tetas sin miedo, cuerpos en resistencia y crítica decolonial, donde abordará la representación del cuerpo femenino en la historia del arte y su relación con el poder y la opresión. Por su parte, el documental Angela Davis: A World of Greater Freedom de Manthia Diawara, nos acercará a la vida y el pensamiento de una de las activistas más importantes del siglo XX.
El Simposio internacional: Memoria colonial, civilización herida reunirá a expertos de diversos campos para debatir sobre las consecuencias del colonialismo y las formas de superar su legado. Asimismo, la conferencia Frans Hals y la memoria colonial, impartida por Ineke Mok y Dineke Stam, analizará la obra del pintor holandés desde una perspectiva decolonial.
Para cerrar el programa, la performance Llevo las mías a cuestas de Aniova Prandy invitará al público a reflexionar sobre la carga histórica y emocional que llevamos a cuestas.
Con esta programación, el Museo Thyssen-Bornemisza reafirma su compromiso con la reflexión crítica y la búsqueda de nuevas narrativas. La exposición "La memoria colonial" ha sido una oportunidad única para repensar las colecciones del museo y abrir un diálogo necesario sobre el pasado colonial y sus repercusiones en el presente.