Ponteareas y Monção unen sus flores en honor a Nossa Senhora da Rosa: una tradición que florece con pasión
Un año más, la magia efímera del arte floral volvió a teñir de color la madrugada en Ponteareas. Fieles a la tradición iniciada en 2009, la Asociación de Alfombristas del Corpus Christi de Ponteareas unió fuerzas con sus "hermanos" del Corpus Christi de Monção (Portugal) para confeccionar una espectacular alfombra de flores en honor a Nossa Senhora da Rosa.
Un grupo de 30 alfombristas, entre los que se encontraban varios niños, trabajaron con esmero y dedicación durante largas horas para dar forma a esta efímera obra de arte. El silencio de la noche se rompió únicamente por la suave manipulación de las flores y los comentarios puntuales mientras la alfombra tomaba vida, culminando su elaboración a las tres de la madrugada.
La confección de estas alfombras florales es mucho más que una labor artesanal; es un acto de devoción y un símbolo de hermandad entre las comunidades de Ponteareas y Monção, unidas por esta singular tradición. La meticulosidad en la colocación de cada flor, el cuidado en los detalles del diseño, reflejan la profunda pasión que anima a estos artistas efímeros.
Para esta ocasión especial en honor a Nossa Senhora da Rosa, los alfombristas desplegaron un rico tapiz de colores y texturas. Se utilizaron nada menos que 1800 claveles, en tonalidades rojas y blancas, que aportaron la base cromática principal de la alfombra. El verde intenso de la tuya y el aroma característico del eucalipto añadieron profundidad y contraste a la composición. Los perfiles del diseño se definieron con la coca de eucalipto, el delicado carulo cortado y la singular textura de la tapa de bellota, demostrando la creatividad y el aprovechamiento de elementos naturales propios de esta tradición.
La jornada de creación tuvo un momento especialmente emotivo con la celebración del cumpleaños de Elvira, quien a sus 89 años sigue disfrutando con la misma ilusión de esta pasión compartida. Su presencia y dedicación son un testimonio vivo del arraigo y la continuidad de esta hermosa costumbre, que trasciende generaciones.
La alfombra floral, efímera en su existencia pero imborrable en su belleza, se convirtió así en un homenaje doble: a Nossa Senhora da Rosa y a la profunda conexión cultural entre Ponteareas y Monção, tejida con la delicadeza de miles de flores y la pasión de sus alfombristas. Un ejemplo de cómo la tradición y la devoción pueden florecer, literalmente, en una obra de arte colectiva.