martes. 16.04.2024

¿Podemos tomarle el pulso a la Tierra?

El sensor de campo de visión amplio del satélite proporciona los datos necesarios, para tener una idea del pulso vital de la Tierra y, por lo tanto, enterarnos de su estado de salud. El Dr. Shumann (Múnich, Alemania) descubrió un efecto de resonancia en el sistema tierra-aire-ionósfera, que hoy se conoce con el término Resonancia Shumann. Lo relevante es que se comprobó que estas ondas resonantes, vibran en la misma frecuencia que las ondas cerebrales de los humanos y animales mamíferos: a 7,8 Hz (ciclos por segundo).

 

Gracias a la aplicación del time-lapse de la Nasa podemos observar en forma permanente cómo evoluciona la biosfera de nuestro planeta.

El sensor de campo de visión amplio del satélite proporciona los datos necesarios, para tener una idea del pulso vital de la Tierra y, por lo tanto, enterarnos de su estado de salud. El Dr. Shumann (Múnich, Alemania) descubrió un efecto de resonancia en el sistema tierra-aire-ionósfera, que hoy se conoce con el término Resonancia Shumann. Lo relevante es que se comprobó que estas ondas resonantes, vibran en la misma frecuencia que las ondas cerebrales de los humanos y animales mamíferos: a 7,8 Hz (ciclos por segundo).

Ahora, lo preponderante y novedoso es que esta frecuencia y el tiempo se están acelerando. De hecho, la resonancia ha subido a 36 Hz.  Esto es preocupante, ya que está provocando cambios y molestias a los seres humanos y en general, a todos los seres vivos del planeta. Algunos de los síntomas pueden ser cansancio, mareos, depresión. Además, podemos decir con total certeza, que los sucesos y los eventos ocurren con mayor rapidez. Ahora, el ser humano en su infinita adaptación quizás pueda levantar su propia frecuencia.

 Entonces por conclusión, debido a que la Tierra está acelerando su frecuencia vibratoria, el diagnóstico aplicable según el Dr, Shumann sería: taquicardia.

¿Podemos tomarle el pulso a la Tierra?